La semana anterior al primer aniversario del atentado contra la AMIA, me encontraba junto con Marcos Doño al frente de la dirección de noticias de la señal de cable Alef Network.
Estábamos a días de realizar la primera producción local de este canal del cual habíamos sido generadores, asumiendo de inmediato un fuerte tono crítico respecto del evidente desvío de las investigaciones y del rol del gobierno de Menem.
Entrevistado por una agencia de noticias del Exterior, mis opiniones quedaron en estridente contrapunto con las de Rubén Beraja quien -además de titular de la DAIA- era el presidente del canal. No era que no me interesara saber si el responsable final era Irán, sino que consideraba que lo esencial y prioritario era buscar acá. Yo no conocía la historia de "Iosi" ni casi nada de lo que años después se confirmaría, pero las señales del oscuro papel de las fuerzas de seguridad e inteligencia ya estaban ahí.
Ese primer programa especial dedicado a denunciar la impunidad del atentado salió al aire en julio de 1995. Muy poco después, se desató por parte de Beraja y sus esbirros una política de persecución, censura y hostigamiento sobre el departamento de noticias de Alef hasta lograr su disolución, no sin antes producirse todo tipo de incidentes.
A continuación, la traducción de un breve fragmento de ese contrapunto inicial:
Artículo completo: http://www.jweekly.com/1995/07/14/argentinian-jews-sad-and-wary-at-first-anniversary-of-bombing/
Más información sobre la historia de la CENSURA SOBRE EL ATENTADO A LA AMIA, en el siguiente link:
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