He escrito centenas de notas críticas sobre las políticas de Israel, tanto respecto de Medio Oriente y el conflicto con los palestinos, como en su compleja relación con las comunidades judías y su nefasto rol en el desvío de las investigaciones de los atentados a su embajada en 1992 y a la AMIA en 1994. También sobre la espuria utilización de esos crímenes por parte de Netanyahu para inclinar la balanza en la disputa nuclear con Irán. Y dediqué buena parte de un libro ("Brindando sobre los Escombros") para detallar los orígenes de un censurable accionar que toma de rehén a la dirigencia comunitaria local.
Reiterado esto, manifiesto mi absoluto repudio a la quema de la bandera argentina y a las amenazas e intimidaciones dirigidas por militantes palestinos contra los jugadores de la selección argentina, y contra Leonel Messi en particular. Y agrego:
Cuando, como se aprecia en el video, el presidente de la Asociación Palestina de Fútbol Jibril Rajoub amenaza y "apunta" contra alguien, no se refiere simplemente a prometer protestas ruidosas. Como recordó la periodista Jana Beris: "en diciembre del 2015, poco después del estallido de una ola de acuchillamientos y otros atentados en las calles de Israel, Rajoub auspició un torneo de tenis en Belén, que llevaba el nombre de Muhannad Halabi, un palestino que asesinó a cuchilladas al rabino Nejemia Lavi y a Aharon Bennet cuando caminaban a orar en el Muro de los Lamentos. El atacante también apuñaló e hirió a la esposa de Bennett y su bebé de 2 años, antes de ser baleado de muerte por la policía israelí. Los organizadores del evento, recalcaron el apoyo de Rajoub y que el evento llevaba el nombre del “mártir” Halabi. (Publicado por la agencia palestina Ma´an el 19.12.15)". Entre muchas otras demostraciones, ya antes "en el 2013 Rajoub auspició un torneo de tenis que llevaba el nombre de la terrorista Dalal el Mughrabi (responsable del asesinato de 37 civiles israelíes, entre ellos varios niños, en un atentado contra un autobús de pasajeros). Se trató de un evento organizado especialmente para mujeres y jovencitas, ante las que se presentó a Mughrabi como un modelo femenino a ser emulado".
La quema de camisetas, fotos y banderas, así como"apuntar" contra Messi, no son para tomar a la ligera. ¿Que no se debe capitular ante el terrorismo contra civiles?. Es verdad. Pero cuando se trata de actos de contenido político, los participantes asumen hasta dónde y porqué están dispuestos a asumir los riesgos. Y el cambio de sede a Jerusalem fue un acto político.
El partido debió jugarse en Haifa, pero la arrogancia del gobierno israelí -y en especial de su ministra de Cultura y Deportes Miri Regev- con el silencioso acompañamiento del gobierno argentino, dispusieron el cambio de sede para convertirlo en una demostración política, desatendiendo las advertencias realizadas privadamente por el canciller argentino Jorge Faurie: http://www.perfil.com/noticias/columnistas/argentina-israel-partido-suspendido-aunque-lo-niegue-el-gobierno-tiene-mas-responsabilidad-de-la-que-asume.phtml
El significado político del cambio de sede lo anunció al mundo la propia ministra israelí Regev: "Ante las reiteradas preguntas sobre el lugar del partido, su respuesta fue categórica: “En un momento en que estamos luchando para trasladar embajadas a Jerusalem, esto ni siquiera es una pregunta. Es uno de los jugadores más populares del mundo, que tiene mil millones de seguidores, y no cabe duda de que lo correcto es que juegue en Jerusalem"
(http://www.itongadol.com/noticias/val/110268/messi-visitara-el-muro-de-los-lamentos.html y https://www.jpost.com/Israel-News/Regev-Lionel-Messi-will-kiss-the-Kotel-559111
(http://www.itongadol.com/noticias/val/110268/messi-visitara-el-muro-de-los-lamentos.html y https://www.jpost.com/Israel-News/Regev-Lionel-Messi-will-kiss-the-Kotel-559111
Los futbolistas se encontraron de pronto, sin información previa y a días del Mundial, siendo usados y en el centro de un hervidero. Debiendo "tomar partido", con el cercano antecedente de semanas atrás: decenas de manifestantes muertos por la represión israelí en la frontera a las protestas palestinas generadas ante la decisión de Donald Trump de concretar el traslado de su embajada a Jerusalem.
El gobierno argentino y la dirigencia de AFA lo sabían o lo deberían haber sabido y tendrían que haber reclamado la permanencia en Haifa. Son corresponsables de lo ocurrido.
Es una pena. Si el partido se hubiera disputado en Haifa, entre otras cosas, muchos se hubieran sorprendido de ver entre los titulares de la selección israelí a cuatro jugadores árabes, que con los suplentes llegan a ocho. Y de conocer una realidad mucho más compleja que la que muestra la lógica binaria y maniquea de todos "buenos" de un lado y todos "malos" del otro.
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